Quiero correr, lo intento pero recién estoy empezando a caminar, no hace mucho que me levanté y por eso trato de disfrutar, tu mano en mí mano, créeme bombón que hace tiempo no siento está conexión. Pero aún así hay días donde todo sigue siendo negro, hay días donde no entiendo nada y en esa confusión no puedo aceptar o comprender que alguien me elija, que alguien me acepte... Así que si dudo, si peleó, si desconfío o si me rindo facil, no significa que no quiera.. significa que tengo tanto miedo que ante la primer señal de algo malo salgo huyendo.
Créeme que nada en vos está mal, sos la medida justa de todo, tu sonrisa que genera en mí una aún más grande, tu nariz tan perfecta y recta, tus pecas tan dispersas que me provocan mirarte constantemente, tus ojos esos que cada vez que me miras brillan con una intensidad que me pone de rodillas. No pensé sentir algo así hace por un largo tiempo, pero llegaste vos y rompiste con todo, llegaste vos y te elegí y decido elegirte de nuevo a pesar de lo difícil que pueda ser.
Por nuestras noches durmiendo entrelazados, por nuestros besos nocturnos, por el sexo mañanero, por las caminatas agarrados de tus bellas manos, por las risas contagiosas, por bailes de madera juntos, por besos calientes en ruta dulce, por regalos de esos detallistas, por las mil fotos que aún nos faltan sacar por eso y más te pido que no te rindas, te pido que nos imagines juntos, de acá a un año viajando solos a un lugar nuevo, o de acá a tres años conviviendo, o de acá a diez años con hijos. Solo imaginanos, con eso alcanza.
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