Me dicen tu estrategia se arruinó, no queda más que ir aprendiendo a vivir solo

No sabia si era una solución, no sabía si era lo correcto, pero tampoco lo quería saber, francamente no me interesaba. Es tan raro que justamente en mis días es cuando me pongo a cuestionar mi vida entera, es cuando más que nunca me pregunto si soy feliz con la vida que yo misma me estoy dando, aunque no siempre lo hago en busca de respuestas, a veces el mismo silencio es la mejor respuesta que yo misma puedo recibir, digamos que yo misma me entiendo. Si, yo me entiendo, pero no los demás... Por ese mismo motivo es que en esos días vivo con cara de perro, discutiendo y levantando al guardia cada vez que creen que algo me ocurre, pero ¿quién entendería esta loca razón?. No tiene sentido que use este pretexto como defensa, pues seria insólito y para algunos gracioso.
Volviendo a mis días complicados, hay noches que me desvelo durante toda la madrugada mirando a la luna; quizás en mi otra vida viví cerca de ella, durante la tarde me quedo callada mirando fijo en la ventana; desafiando a mi memoria a ver que tal lejos llega, cuando estoy acompañada de una persona se me hace imposible seguirle la conversación; pues nadie mas que yo misma me importa,  ante cualquier conflicto se me hace más que imposible mantener mi paciencia como primordial; olvidando cada paso que como mediadora
eh aprendido. Pero tras todo esto, siempre soy la misma, siempre le temeré a los mismo prejuicios, siempre sonreiré al atender el teléfono, siempre haré esas preguntas tontas, siempre seré yo.