El eclipse

El era el alma de la noche, cuando lo vi recuerdo que estaba solo por la playa, eso me cautivó.. su soledad, esa misma que hacia que toda chica que pase por el no pueda resistirse, esa que lo hacía interesante, esa soledad que el gozaba. Nunca me gustó caer en esos tipos de juegos y para ese entonces yo estaba de novia, trate de pasar cerca de la red sin dejar que me atrapará, no iba a caer en su trampa como tantas y  aunque lo logré nunca, deje de pensar en el.

Una noche recuerdo estar furiosa con el y mientras caminabamos juntos y el no paraba de repetirme una y otra vez que teníamos que estar juntos, le señalé el cielo y gritando le dije "ves como el sol siempre se esconde cuando está la luna, y visevera, bueno nosotros somos así, vos sos la luna y yo soy el sol, nunca vamos a estar juntos" a lo que el sonriendo me respondió pero de vez en cuando hay eclipses, ese fue el momento donde mí yo quedo en jaque, sonreí y por dentro pensé que me era imposible alejarme de él.  

Con el pasar de los días me gustaba jugar a acercarme más y más a la red, sin contacto físico porque yo tenía novio pero conociéndolo, escuchandolo, contándole esas cosas que nunca les contas a nadie. El tenía ese no sé que que me hacía querer pasar más y más tiempo con él, me producia algo que me era imposible contener, pero como todo amor de verano yo debía volver a mí realidad y seguir mí camino sin el, decidí dejarlo atrás para enfocarme en mí relación, el con los meses conoció otra chica con quien mantuvo una relación bastante sería por lo que se veía. 

Así es como hoy para mí un eclipse no es un simple eclipse, con las vueltas de la vida, mí camino se volvió a unir a el y justo hoy que los astros decidieron que ocurra un eclipse, lo vimos juntos, el desde Capital y yo desde el mar pero veiamos la misma luna, el mismo sol, las mismas estrellas y sonreímos acerca de las mismas cosas. Dos años despues, nuestros caminos se unieron como si estuviese predestinados, al poco tiempo que mí relación anterior terminó, también la de el y como si fuese poco todo ocurrió los mismos días donde el sol decidio filtrarse en la noche para volver a abrazar a su luna.