Cuando la luna viaja a Rosario, y cuando el sol viaja a Capital

Ocurrió un eclipse hace dos años, la fiesta nocturna y los días cálidos de la naturaleza se unieron en un solo sentimiento, hace dos años Capital abrazo a Rosario, hace dos años la luna le prometió al sol que lo escucharía cada vez que el lo necesite, hace dos años el sol confió en la luna más que en cualquier de las mil estrellas que esa noche había, hace dos años este eclipse quedó guardado por siempre dentro de ellos, nunca entendieron bien que paso pero saben que no se les olvidará.
Hoy de nuevo la luna busco al sol, hoy de nuevo Rosario abrazo a la capital quizás no físicamente pero así lo sintieron. Hoy la luna decidió viajar a donde vive el sol para por fin darle ese beso que nunca pudo, hoy el sol se apoyó en la luna y volvió feliz y contento, la luna y el sol entendieron que quizás este eclipse significaba que era su momento, hoy se repitio el nuevo eclipse, y promete ser mejor que el anterior.