No entendía porque siempre terminaba arruinando todo, el amor de mi vida se había ido y ahora ni siquiera me podía contestar una sola pregunta siendo que cuando el me fallo yo fui a buscarlo para poder entenderlo, mi madre estaba en su cuarto fingiendo ser la victima después de haberme gritado que podría morirme que a ella no le importaba, mi padre se encontraba a 800km quien sabe que estaría haciendo ahora, mis amigas hacia días no sabia nada de ellas desde que mi celular se rompió, y mi hermana la ultima vez que hable con ella fue peleando, y lo único lindo del día había sido la sonrisa de mi hermano bebe que a penas entiende que soy su hermana.
Me sentía sola, quería que alguien me abrace mientras doria, no encontraba una persona que lo haga sentía que nadie podría lograr hacerme sentir eso que tanto buscaba, pero cuando cerraba los ojos y lo imaginaba sospechaba que ese sentimiento que tanto deseaba y anhelaba ya lo había sentido antes en el pasado con personas que aun están, pero ya no las veo así.
Nunca estuve lista para arreglarme sola por completo, nunca me gustaron las personas que eran adicta a la soledad, nunca creí que llegara a encontrarme en este lugar, y lo peor es que siento que es mi culpa. Miro al rededor y no hay nada, como cajones vacíos estaba mi corazón.
Estaba cansada, siempre resultaba lo mismo, hablábamos y creía que había una mínima posibilidad de poder volver creía que habría una pequeña gota de luz, pero cuando estoy al punto de abrir la ventana para dejar que el sol vuelva a iluminarme, empieza a llover de nuevo y comienza a tronar encima mio, y quedo completamente empapada pregúntame porque de nuevo confié en el si ya se como termina todo, se que el se ira y me dejara de nuevo sola. Pero como no puedo abrir los ojos para ver la realidad que el me esta haciendo pasar, creo de nuevo en el, y es que estoy enamorada que me dejo hacer cualquier cosa cuando el me demuestra o me dice como si hubiera alguna oportunidad de que estemos juntos.
El me decía que me seguía amando, que sus sentimientos no habían cambiado y yo le creía, yo empece a ilusionarme con la posibilidad de volver, con la ilusión de volver a vivir la vida como un cuento, y es que desde que te fuiste entendí que todo tiene un final, que no existen los cuentos de hadas como creía hasta hace dos meses. Desde que te fuiste el cielo se pinto de negro muerte.
Oh, oh, oh.. Ahí estaba el diciéndome que había llorado, aquí estaba yo del otro lado de la pantalla queriéndole decir que aunque otro me había tocado, llore porque solamente quería que sea el quien me toque. Quería dejar de hacerme la fuerte, quería caer en sus brazos llorando, pero sabia que eso no funcionaria ya lo había echo y no había obtenido ningún resultado. Cada minuto que pasaba me daba cuenta que el se había convertido en mi, no podía pensar, no podía entender, pero luego me preguntaba si estaba tan mal ¿Por qué dejarme?. No eramos tan iguales porque a mi jamás se me habría pasado por la cabeza el pensar y mucho menos el hacer que esto forme parte de la historia y se acabe de un día para el otro.
Cuando estas mal y haces algo para estar bien te sientes egoísta, cuando no piensas como le afectara a los demás y solo crees que harás algo para poder salir un día de la depresión en la que vives, te sientes una mala persona te sientes como si únicamente pensaras en vos. Era lo que me estaba pasando, por primera vez deje al resto de las personas de lado y hacia que quería, lo que sabia que me haría pasar un momento agradable y poder distraerme de la vida lamentable en la que vivía, había intentado todo para que mi vida vuelva a hacer un cuento de hadas como hace unos meses atrás, pero no funcionaba, a cada paso entendía que el ya no volver. De a ratos suplicaba que deje sus pensamientos de lado y venga a abrazarme, que deje de pensar y de contestar un no se a todo y venga a pasar una noche conmigo, que no piense en el resto personas y me diga que todo estaría bien.
No podía y aunque había gente tierna que no me conocía pero quería que este bien, era semi imposible que pueda sonreír, porque me ponía a pensar y entendía que el no estaba mas, me dolía, gritaba, lloraba y la cama me tenia atada para quedarme siempre en ella. Cuando por fin tome fuerzas para levantarme agarre la caja donde había archivado todos nuestros recuerdos, esos recuerdos que en un momento me hicieron tan feliz y ahora no me dejaban dormir, esos que me obligaban a salir donde no quería, a hacer cosas que no quería, esos que me decían que ellos formaban parte del pasado ahora debía escribir mi futuro, pero no quería sin el.
La vida seguía pasando y yo no quiera, ya hacia 20 días que el no esta, 20 días que no mi cuerpo se encuentra enfermo, 20 días que me duermo llorando, 20 días que que tengo miles de preguntas que nadie puede responder.
¿Cómo miras al hombre de tu vida y le dices adiós sabiendo que nunca lo volverás a tener? Yo era la luz de sus ojos y todo lo olvido, se fue como si fueramos extraños, como si no habríamos tenido una historia por la cual pelear. Prometió hasta lo prohibido y todo lo olvido.
Me sentía devastada, caminaba como si mi vida estuviera bien, quería gritar tenia que sacar de alguna manera todo ese dolor que sentía, ese dolor que me impedía volver a ser lo que yo siempre fui, no tenia ilusiones, mis planes como un lagrima se iban resbalando hasta deshuesarse, me daba vuelta para ver si el venia pero ya no estaba ahí, me dolía tanto que quería acostarme en el medio de la calle, la gente miraba como lloraba pero nadie preguntaba nada solo era una adolorida mas.
Trataba de pensar en otra cosa, no quería concentrarme en que todo se había acabado porque entendiéndolo ya no tenia remedio, era la primera vez que entendía y comprendía que tenia que dejarlo ir, y aunque no quería tenia que seguir a mi mente y no a mi corazón. No podía dejar de abrazarlo sabría que cuando este sola lo necesaria tanto, casi tanto como ahora.
El dolor tiene ese poder, te causa intriga y es capas de llevarte a hacer la cosa mas estúpida como pedirle que vuelva sabiendo que no lo hará, decirle que lo amas aunque el ya no lo haga como antes, llorar aunque nada vaya a cambiar, no te deja dormir como si pensar fuera mejor, escribir como si el lo fuera a leer y a volver por ello, hablar con personas que antes lo habrías hablando pensando que solo así te podrías sentir mejor, fingir con tus amigas que estas feliz siendo que escuchas la palabra "NOVIO" y se te llenan los ojos de lagrimas, tienes ese nudo en la garganta y es ahí cuando piensas ¿Por qué me pasó esto?
Había echo todo lo posible para que no se vaya, para que se arrepienta, había dejado mis problemas de lado y aunque tuve un pequeño bajón, solo me concentraba en decirle que lo amaba, estuve toda la mañana destancandole cuanto lo había extrañado, me base en nuestro pasado juntos para enseñarle que juntos eramos felices, pero nada servia.
Sentirlo como lo sentí fue uno de las mejores cosas que me pasaron en la vida, me di cuenta lo fácil que me había enamorado de el, luego de besarlo con tanta ternura me di cuenta que seria semi imposible olvidarlo ya que sus besos se hacían adictivos con tanta facilidad. Cuando note que el ya estaba diferente es cuando mi ficha cayó, entendí que por mas que yo lo amara y ponga lo mejor de mi esto jamas cambiaría ya que el no era el antes. Hablábamos y me daba lo diferente que somos y que quizás siempre lo fuimos pero nuestro amor era una venda que nos impedía poder verlo.
No podía estar diciéndote todo lo que te comentaba, y aunque siempre te he dicho lo que siento sin algún problema, ahora te estaba confesando que moría de hambre de tu cuerpo, te dije que busques una soga y un cinto. En mi mente estaba claro mi plan, te ataría por si te arrepientes, antes de dicha acción te habría desnudado y ahí es cuando te tendría como mas me gustas, así sin nada, no uses ropa cuando estamos solos, amo verte así. Eres tan hermoso.
Quería besarte tanto tanto, que iba a necesitar una botella de agua al lado mio para no deshidratarme, quería que sea lo mas lento y a la vez lo mas doloroso y apasionado que te han echo sentir, quería que me vieras que moría por hacer esto quería disfrutarlo, quiero besarte todo.
Sabia que luego es cuando tu te pones como loco, y es la parte donde miro tu cara de placer y creo que voy a enloquecer, es como tocar el cielo con las manos, vamos hazme volar alto como siempre que me encanta, me encanta.
Besame recordando que es la ultima vez, y hagamos de cuenta que la ropa quema.
Voy a oscuras te extraño tanto, hoy no sale el sol, hoy me duele y tengo ganas de verte o no ver mas. Me duele la vida sin ti, ven y abrázame-
Tenia tantas expectativas en nuestra "despedida" era un nuevo reto para mi ese de vivir un momento sin pensarlo, era todo un desafío para una maniática cinefila el no creer que esto solo es una película dramática y que solo estamos besándonos porque nos amamos, porque en lo mas profundo de mi si sabia que nos estábamos besando por ultima vez porque el decidió irse, irse para no volver. Y aunque trate de negociar con el, cambiando, aplicando, y pidiéndole oportunidades nada había funcionado.
La imagen de la ultima vez que nos habíamos encontrado era sinceramente patética, mi rimmel completamente corrido y tu como si nada, yo mirándote con cara de "no me dejes ir" y tu como si nada me abriste la puerta, y me dejaste que me vaya, pareciera que eso no te este doliendo nada, mientras yo estaba al borde de la locura, donde yo sentía que estaba cayendo de un precipicio.
Por eso mismo es que habíamos dicho de hacer esta despedida, con champagne, chocolates, películas y muchos te amo... Pero tanto mis amigas como yo teníamos ese presentimiento que no seria una despedida de ambos, sino solamente mía, que yo seria quien te demuestre que estoy completamente enamorada de ti, y aunque digas que aun me amas, si en verdad fuera así tratarías de probar cualquier cosa con tal de no perderme, pero no es así. Mi plan era besarte hasta que mis labios me duelan, abrazarte tanto que cuando me vaya mi perfume te haya quedado impregnado en el pecho, hacerte el amor casi tan tiernamente como nuestra primera vez, mi plan se basaba literalmente en demostraste cuanto te amé, cuanto te amo y cuanto te amaré.
Sabia que había un lado positivo y un negativo de escucharte, tenia días donde creía que esto era uno de esos meses que tu mamá contaba que se encontró lejos de tu padre, recuerdo que cuando lo contaba ambos reíamos pensando y mira como están ahora de felices. Comenzó siendo una anécdota nueva para nuestros nietos, pero los días seguían pasando y el cada vez me hablaba menos, ya no se interesaba por lo que me ocurría y aunque le hablaba no sentía que era el de siempre.
No podía soportar pensar que se acababa todo, no podía, era mas fuerte que hasta mi propio cuerpo. Recuerdo que una noche de esas donde el insomnio te acompaña hasta la universidad, trate de mentalizarme de que si existía la idea de que esto sea el final por un largo, o quizás para siempre y fue inexplicable para la ciencia y la psicología como es que mi cuerpo comenzó a temblar, mis lagrimas se acumulaban de manera tan rápida en mi cara, no dejaba de pensar en todas las cosas tan infantiles y divertías de las cuales se trataba nuestra relación esas mismas cosas que nunca nadie entendió. Solo nosotros sabíamos como era nuestro idioma de bebes, solo nosotros sabíamos porque cuando estábamos solos en vez de encerrarnos en una pieza jugábamos a "al que se le cae el globo pierde", solo nosotros nos poníamos a jugar a las escondidas en los supermercados, solo nosotros nos corríamos jugando. Solo nosotros, siempre fue una pareja muy pareja, muy de a dos, hasta que tu mismo decidiste tomar una decisión que te beneficiaba a vos, sin haberme contado del problema que te estaba ocurriendo, tu solo me sacaste de tu vida, como quien saca la basura de su casa, como quien tira un boleto viejo de colectivo, como quien tira un envoltorio de caramelo, así lo hiciste conmigo.
Nunca mi teléfono había sonado tanto y nada me importaba, nada se trataba de el, salidas, invitaciones, halagos, pero nada tenia importancia si no se trataba de el. No tenia gracia estar en mi universidad si no tenia quien me haga reír constantemente. No tenia motivos para sonreír me encontraba atrapada en una gran depresión que se me hacia cada vez mas difícil salir.
El prometió que esto era para siempre, dijo que su vida sin mi no tendría sentido y ahí esta el alistándose para romper la noche en uno de esos boliches, yo tengo mi caja de pañuelos, miles de películas románticas descargadas, mucho helado y café para no sentirme tan sola.
Quizás solo se trata de cambios que ambos atravesamos, yo desde mi lado de querer que todo vuelva a ser como antes, y el de volver a tener la vida que cualquier adolescente de tres años menor que el lleva. Solo te pido que recuerdes porque fue que todo termino tan mal, porque fue que tu arruinaste todo de un día para el otro.
Es como si estuviera gritando, sin que nadie me oiga, casi te sientes avergonzada de que alguien puede ser tan importante que sin el te sientes como si nada. Nadie podra entender cuanto duele, te sientes sin esperanzas como si nada pudiese salvarte y cuando todo termine y se haya ido hasta deseas que todas esas cosas malas regresen para que puedas tener lo bueno-
Ahí estábamos hablando de nuevo, el argumentando sus decisiones, yo tragándome el orgullo y todo aquello que te impide decir lo que sientes, le suplicaba que lo amaba que prometió quedarse por siempre que no puede irse, el dijo que podía acompañarme pero nada cambiaría entre nosotros, con mi cara empapada lo miraba pensando por dentro ¿Qué fue lo que nos sucedió?. Era la primera vez que no quería que me de la llave que siempre escondías cuando me quería ir, pero esta vez lo hiciste tan simple abriste la puerta como si no fuera yo quien me iba.
Todo sucedió tan rápido que jamas entendí que fue lo que te hizo mal, prometí cambiar absolutamente todo pero nada te sirvió. No había manera que el entienda al 100% lo que yo le decía, el no abría los ojos de la decisión que tomaba y yo quería aprovechar este tiempo porque sabia que después seria tarde, no quería perder tiempo lejos tuyos. Hasta que vino al peor parte, donde me dijo que estar conmigo le hacia mal, ahí entendí que jamas volvería a ser lo de antes, donde termine por entender que solamente quedaría olvidar todo lo que había pasado, el luchar era en vano, había perdido la guerra, la lucha, la batalla, cuando me di cuenta no tenia ningún arma mas estaba desnuda debajo de el y todo sucedió tan rápido y ni siquiera pude ver su cara de satisfacción que siempre había mientras nos alargábamos la vida.
A penas podía levantarme de la cama, y cuando lo lograba me chocaba con la cocina donde inventábamos miles recetas con tal de vivir mas momentos juntos, secándome las lagrimas me sentaba sobre el sillón de mi living donde cuando mis padres se iban nos besábamos hasta no sentir los labios, donde los escalofríos mas fuertes sentíamos debido a esas películas que tu traías, donde nos empalagábamos de chocolate y café. Sin algún otro motivo de seguir de pie, me volvía a acostar en mi cama, aquella que nos sintió desnudos, aquella en la cual era genial para hacer el amor.
Cerrando los ojos todo era tan fácil, pues ahí estabas tu tan como siempre, mal vestido y desprolijo pero me amabas como pocos, me besabas como un dios, me hacías tocar el cielo con las manos, la felicidad no era un estado de animo sino una característica mía cuando tu estabas cerca. Tiempos donde creía que el amor existía y no era una simple fantasía, donde sentía que algo podía ser eterno, donde creía en nuestro mundo y tenia planes, teníamos planes juntos, oh si que los teníamos.
"Es muy interesante lo que sostienes Azul, estas queriendo decir que no queres ser mas una hoja que va y viene para donde el viento la lleve, que queres ser de una vez el árbol que no se mueva. Pero eso lleva tiempo." Dijo mi terapeuta, pero mientras ¿que? me pregunte yo.
Otra vez el mundo había girado y yo me encontraba en un lugar nuevo, extrañando lo viejo como siempre, no entendía, tenia miedo, extrañaba, quería que todo sea como antes pero por mas que llorara; que me lastimara entendía que no cambiaría. Nunca nada de lo que me imaginaba, de lo que soñaba me sucedía, deseaba tener un día rosa no todos ,solo uno, pero mis días eran cada vez mas grises, sin un sol que me alumbrambra era difícil verle color a las cosas.
El, mi cable a tierra se había marchado sin un fundamento que me dejara satisfecha, y como siempre yo había luchado, no me había dado por vencida pero claro esta, como una tal Sola Con Su Amor que soy, el no volvió, el no volverá.
Mi psicóloga había dejado muy en claro "No te permites ser feliz, crees que no puedes tener momentos perfectos" quizás eso era todo, el me hacia tan bien que eso me llevaba a alejarlo porque muy en el fondo sabia que no podría llegar a ser tan feliz. Pero no tenia sentido que algo que me haga tan bien yo lo tome como algo malo. Pero si ese fuera el caso ¿porque todavía no me ah hablado? Es como si estuviera de acuerdo conmigo.
No quería que sea el fin, pero tampoco encontraba otra solución, esto a el en el futuro le seria muy fructífero, y ¿yo?... yo cada día compruebo mas que no sirvo para estar en pareja.
Era posible que algo que sentía que iba a ser mas que eterno de un día para el otro se desgaste al 80%, siempre odie las despedidas aunque nací al lado de ellas. Sabia lo que el odiaba pelear aunque para mi haya sido como una hermana la pelea, el no iba a entender jamas que no era algo que yo quería, es mas era algo que odiaba. Solo quería que estos peores momentos vuelvan atrás, que todo vuelva uno o dos meses atrás donde todo estaba bien.
El jamas de los jamases entendería mi bipolaridad, yo no trataba alejarlo pues como podría si es lo mas parecido a la perfección que eh conocido. Es que por mas que le tuviera es mas profundo amor yo sufría una gran desorden donde las ideas de mis problemas me hacían angustiarme aun mas. No podía manejar mis emociones, ni tampoco mis problemas, en pocas palabras no podía con mi vida, entonces menos podía hacerlo feliz a el.
Lo peor de todo es darme cuenta de todo esto, observar que el no es feliz por ti y que esta empezando a cambiar del mismo desgasto, mil y una de veces había intentado dejarlo apartando mi obsesionante amor por el, pero aunque el sufría por mis síntomas inoportunos, también sabia muy en el fondo que lo amaba por eso mismo no quería dejarme irme. Una y otra vez volvíamos sin llegar a separarnos, en los momentos donde eramos muy felices y nos sentíamos muy bien era toda la vida, que quería ser siempre así con el toda la vida, que quería ser siempre así con el.
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